Sí, hay un estrés bueno

 

El estrés (eustress) funciona bien como mecanismo a corto plazo.

El estilo de vida que llevamos hoy en día, sin embargo, fomenta otro tipo de estrés, nocivo por constante y sostenido, que no nos hace ningún favor y termina pasándole factura a nuestra salud.

Y, aunque no podamos controlar muchos factores externos, sí debemos prestar atención a pequeñas cosas del día a día que nos causan estrés sin necesidad.

Por ejemplo, poner 𝘥𝘦𝘢𝘥𝘭𝘪𝘯𝘦𝘴 a todo por defecto.

Que sí, que nos sirve para ponernos presión, pero también nos agobia y nos bloquea no estar a la altura de las expectativas que creamos en nosotros y en los que nos rodean.

Haz la prueba.

La próxima vez que alguien te pida algo en el trabajo, evita decir:

❌ Ahora mismo me pongo a ello

❌ Esta misma tarde lo miro

❌ Mañana sin falta

Este tipo de frases nos crean expectativas innecesarias y poco realistas, no dejan espacio para hacer un trabajo de calidad ni para los imprevistos.

Prueba con:

✔ Lo miro en cuanto pueda

✔ Lo tengo en cuenta

✔ Le doy prioridad a partir de ahora

Sé amable contigo, esto es algo que deberíamos aprender fruto de una sana autoestima

Respeta tus tiempos y date un voto de confianza.

Y a ver qué pasa…